Cécile Nivet, jefe de proyecto RMT AFORCE, CNPF-IDF; François Morneau, coordinador RMT AFORCE, CNPF-IDF; Christophe Chantepy, experto nacional DFCI, ONF; Eric Rigolot, ingeniero de investigación, INRAE – URFM; Isabelle Bertrand, jefe de proyecto DFCI, MASA; Philippe Riou-Nivert, ingeniero, CNPF-IDF.
Los retos que plantea la mejora de la protección contra los incendios forestales son numerosos y complejos. Requieren la coordinación de un amplio abanico de actores con competencias diversas. Para la I+D , estos trabajos ofrecen perspectivas interesantes, algunas de las cuales ya se están abordando en el seno de la RMT AFORCE.
Alrededor de 120 personas se reunieron en la región parisina los días 20 y 21 de marzo en el nuevo campus de AgroParisTech (Saclay) para debatir sobre la prevención del riesgo de incendios forestales, tema transversal a las prioridades de la red AFORCE [2].
Centradas en la prevención y la preparación, dos etapas decisivas en la gestión de crisis, las dos jornadas brindaron la oportunidad de redefinir conceptos. En particular, pusieron de relieve la importancia de no limitar la evaluación de riesgos a la medición de peligros. En concreto, vimos lo importante que es identificar lo que está en juego y los daños potenciales, lo que a su vez está ligado a la vulnerabilidad.
¿Cuál es la situación actual del riesgo y cómo está cambiando?
A escala europea, hemos visto que el número de incendios no ha dejado de aumentar en los últimos veinte años (2006-2023), con un incremento significativo del número de grandes incendios en algunos países como Portugal, Grecia y Francia.
En Francia, la presentación del IGN destacó la importancia de recopilar datos a largo plazo sobre los incendios forestales, en particular para apoyar las políticas de prevención y evaluar su eficacia.
Proyecciones climáticas que prevén un aumento del riesgo
Los modelos, tanto a escala europea como nacional, muestran un aumento de los niveles de riesgo, con mayores superficies quemadas. En Francia, las proyecciones climáticas realizadas a medio y largo plazo prevén en particular
- una exacerbación de la vulnerabilidad a los incendios en zonas que ya estaban especialmente afectadas (zonas históricas);
- une extensuna expansión geográfica a partir de estas zonas, formando una media luna desde el sureste, suroeste, centro-oeste y oeste;
- una ampliación en el tiempo, con un alargamiento significativo del periodo sensible, sobre todo en el suroeste;
- una mayor probabilidad de sinergia entre el tamaño y la potencia de los incendios.
Las proyecciones no pueden tener fácilmente en cuenta la dinámica de la vegetación combustible, pero es probable que su sensibilidad aumente en todo el país como consecuencia del cambio climático.
¿Qué cambios reglamentarios y organizativos son necesarios?
Estas dos jornadas brindaron la oportunidad de revisar el funcionamiento actual de la DFCI y de comprender los cambios en curso, ya sean legislativos, reglamentarios u organizativos. En general, los retos que plantea la mejora de la protección contra los incendios forestales son numerosos y complejos, ya que requieren la coordinación de un amplio abanico de partes interesadas y de competencias.
La normativa evoluciona, pero aún no lo suficiente
La ley de 10 de julio de 2023 se está aplicando (a paso de tortuga) mediante siete decretos de aplicación, entre ellos uno sobre la obligación legal de desbrozar (OLD). Aunque esperados con impaciencia, estos avances fueron relativizados por los ponentes, que reclamaron un cambio de paradigma en las políticas públicas para afrontar el futuro: aún no avanzamos lo suficientemente rápido, ni con la fuerza suficiente. El desarrollo de un enfoque integrado de prevención-lucha contra el fuego desglosado en tres sectores geográficos (Territorios históricos, Nuevos territorios del fuego, Territorios de futura extensión) recibió el apoyo de los participantes.
Sensibilización y formación: aspectos estratégicos de la prevención
Dado que el 90% de los focos de incendio están relacionados con la actividad humana, las iniciativas de sensibilización y apoyo (a la sociedad civil, a los propietarios de tierras, etc.) son un componente clave de la reducción de riesgos, como señalaron numerosos participantes (ONF, FNCOFOR, CNPF, etc.).
También comienzan a desarrollarse iniciativas de formación e intercambio de experiencias en los «nuevos territorios del fuego», como en la región de Centre-Val de Loire (reflexión multi-socios liderada por la DRAAF con cursos de formación conjunta «Forestales-Bomberos»), en los Vosgos (desarrollo de herramientas compartidas entre cámaras de agricultura) o en las zonas protegidas (intercambio de buenas prácticas entre regiones muy afectadas y nuevas regiones).
Desarrollar el marco de prevención
La esclarecedora presentación de António Salgueiro sobre el desarrollo de un sistema de Gestión Integrada de Incendios en Portugal tras los mortíferos incendios de 2017 (100 muertos, 500.000 ha quemadas) muestra, no obstante, que cualquier sistema tiene sus límites cuando las condiciones extremas dan lugar a incendios muy intensos. El enfoque de intentar erradicar totalmente el riesgo parece ilusorio y contraproducente frente al de priorizar los problemas.
¿Cuáles son las perspectivas de la I+D?
Por lo que se refiere más concretamente a los retos de la investigación y el desarrollo, hemos visto que no faltan perspectivas, sobre todo en materia de:
- modelos y herramientas de simulación, para comprender mejor ciertos fenómenos (focos, propagación) o predecir la evolución de las zonas de riesgo en el contexto del cambio climático. El proyecto europeo FIRE-RES demuestra que estos enfoques pueden servir para optimizar la ordenación del territorio (con el fin de limitar los riesgos de propagación de incendios) y que incluso podrían ser utilizados por los servicios de lucha contra incendios para anticipar mejor la progresión de los frentes de incendio alimentando los modelos con datos recogidos en tiempo real.
- la teledetección, en particular gracias al despliegue progresivo por el IGN de la tecnología HD Lidar, que pronto se utilizará para una amplia gama de aplicaciones, entre ellas la gestión de los incendios forestales. Las perspectivas incluyen el desarrollo de un mapa nacional de combustibles para predecir mejor la potencia de los incendios, y trabajos que están empezando a mejorar nuestro conocimiento de la accesibilidad de los bosques (detección y caracterización de carreteras situadas en zonas boscosas).
Las necesidades en I+D fueron presentadas por Frédéric Mortier (IGEDD) en su calidad de coordinador de la misión gubernamental sobre incendios forestales [3]. Se refieren a la continuación de los trabajos y la mejora de los conocimientos en los ámbitos siguientes:
- proyecciones climáticas;
- dinámica de los incendios y desarrollo de modelos de ayuda a la toma de decisiones (comportamiento de los incendios, etc.)
- la muerte de los bosques y la dinámica de los bio-agresores (fenómenos complejos y poco conocidos)
- reservas y flujos de agua en el suelo y la vegetación, incluidos los sistemas radiculares;
- opciones de silvicultura y gestión forestal en relación con la vulnerabilidad a los incendios;
- el impacto de los incendios en la biodiversidad y la recuperación tras el incendio, el carbono y los gases de efecto invernadero;
- ciencias humanas y sociales, en particular para comprender mejor los perfiles de los pirómanos.
Algunos de estos trabajos ya están en marcha dentro de la red AFORCE (véase el recuadro 2). Otros trabajos podrían iniciarse pronto si sus miembros ven interés en ellos, en particular en el marco del programa de renovación de la red para el periodo 2026-2029.
¿Hacia una gestión múltiple de los riesgos?
Por último, se señaló que los riesgos asociados a los incendios forestales interactúan con otros riesgos, en primer lugar los asociados al clima, en particular la sequía. En este contexto, es imposible tratarlos de forma aislada. Los participantes se mostraron de acuerdo con esta observación y con la necesidad de avanzar progresivamente hacia una gestión integrada de los riesgos. La investigación necesaria para desarrollar esta visión multirriesgo está actualmente en curso en el marco del PEPR FORESTT y deberá continuar con el desarrollo de métodos y herramientas que se concebirán conjuntamente con el RMT AFORCE.
Todas las presentaciones del taller están disponibles en línea en el sitio web de RMT AFORCE (https://www.reseau-aforce.fr/). Las actas del taller, actualmente en preparación, también se publicarán en breve.
Gracias a nuestros financiadores:
Este evento ha contado con el apoyo activo del Ministerio de Agricultura y Soberanía Alimentaria y de la interprofesión nacional France Bois Forêt.
[1] Muchas de las ideas y puntos de vista expresados por los ponentes durante las sesiones de debate (los retos a los que se enfrentan los bosques privados, la cuestión de la fragmentación de la propiedad, la integración del riesgo en los documentos urbanísticos, la importancia de los PDPFCI, etc.) no se incluyen aquí, ya que se les dedica un resumen en este informe
[2] Lanzada en 2008 por silvicultores, la RMT AFORCE es una red francesa para la adaptación de los bosques al cambio climático. Apoyada por el Ministerio francés de Agricultura y France Bois Forêt, está coordinada por el departamento de I+D del Centre national de la propriété forestière (CNPF-IDF) y reúne a 16 socios de la investigación, el desarrollo, la gestión y la enseñanza superior y técnica: APCA, AgroParisTech, CA PDL, CNPF, EFF, EPLEFPA des Vosges, FCBA, GCF, Gip Ecofor, IEFC, IGN, INRAE, LEGTPA de Meymac, Météo-France, ONF y SF CDC. La red crea foros de intercambio y produce diversos recursos (herramientas, formación, resúmenes, etc.) basados en la experiencia individual y colectiva de sus miembros. Su labor beneficia a sus miembros y, más ampliamente, a todos sus destinatarios (técnicos, gestores, asesores, profesores, etc.).
[3] Mortier F. y otros, 2023. Informe de misión sobre la «Politique de prévention et de lutte contre l’incendie de forêt dans un contexte d’extension et d’intensification du risque dû au changement climatique. Tome 2: «S’adapter au changement d’ère: apprendre à vivre avec le feu pour les moyens et long terme» (Julio 2023)». 248 pages.
Cécile Nivet, Directora del Proyecto RMT AFORCE, CNPF