Del 8 al 10 de octubre de 2024, el proyecto FIRE-RES celebró su reunión general en Burdeos y Mimizan, congregando a investigadores, agentes locales y socios europeos de los 11 Living Lab. A través de los Living Lab, el proyecto FIRE-RES pretende explorar soluciones prácticas para hacer que los paisajes forestales sean más resilientes ante riesgos de incendios importantes, como los sufridos en el suroeste de Francia en 2022 y en Portugal en 2017, incorporando innovaciones tecnológicas, ecológicas y organizativas. Coorganizado por el IEFC y el CTFC (Centre de Ciència i Tecnologia Forestal de Catalunya), el tema principal del evento fue la financiación de paisajes resilientes, con las cuestiones socioeconómicas y la innovación en el centro de los debates.
Tres días de intercambio e innovación
El acto se desarrolló a lo largo de tres días, alternando conferencias y sesiones en campo. La particularidad del programa consistió en que los dos primeros días estuvo abierto al público y contó con traducción simultánea francés-inglés, lo que permitió la asistencia de expertos del sector y de agentes clave del Laboratoire Vivant des Landes de Gascogne.
La primera jornada se celebró el 8 de octubre en Burdeos. Se abrió con los discursos de François Gros, Inspector General de la Prefectura de Nueva Aquitania, y Sophie Weber, Consejera Regional. Los protagonistas de Aquitania (SDIS, Misso Groupama, CNPF, ARDFCI) centraron sus debates en los retos de la gestión forestal frente al cambio climático, subrayando la necesidad de combinar enfoques ecológicos y económicos para crear paisajes forestales sostenibles.


A continuación, líderes de la innovación como Blueforest y Nactiva Palladium, así como socios europeos, presentaron las soluciones desarrolladas y probadas por el proyecto en diversas sesiones. Estas presentaciones abordaron los retos, las oportunidades y los modelos innovadores que implica la financiación de paisajes resilientes, al tiempo que destacaron la importancia de integrar las soluciones técnicas y financieras propuestas por estos actores en las estrategias de gestión forestal.
La participación de agentes locales, como la SDIS y la CNPF, ha sido crucial para garantizar un enfoque pragmático basado en las realidades sobre el terreno, facilitando la transición hacia una gestión forestal más resiliente. Al mismo tiempo, las aportaciones de los socios europeos han contribuido a ampliar las perspectivas y proponer soluciones complementarias.

La jornada del 9 de octubre fue una jornada de inmersión organizada en Mimizan, con una visita al centro de transformación de madera FB Bois, y demostraciones tecnológicas, como el uso de drones durante la extinción de incendios o las operaciones de extinción de los bomberos con camiones especializados. Las innovaciones tecnológicas, como el uso de LIDAR para la cartografía de riesgos, son cruciales para comprender mejor la dinámica de los incendios y orientar las estrategias de gestión forestal sostenible. Marie-France Delest, Presidenta de la Oficina Intermunicipal de Turismo de Mimizan, y Xavier Fortinon, Presidente del Consejo Departamental de Las Landas, tomaron la palabra durante la jornada para recordar a los participantes los riesgos que los incendios forestales entrañan para la economía local, y también para poner en contexto las cuestiones relacionadas con el uso del suelo y el coste de la lucha contra los incendios.




Por último, la jornada del 10 de octubre, celebrada en Burdeos, fue una sesión de trabajo reservada a los socios para evaluar los avances del proyecto y planificar el último año de actividades. Los resultados preliminares del proyecto FIRE-RES han demostrado que se han logrado avances significativos en la identificación de mecanismos financieros de apoyo a la gestión sostenible de los paisajes forestales, pero siguen existiendo retos, sobre todo en lo que respecta a la integración de las innovaciones en las políticas públicas locales.
Acontecimientos destacados
El evento brindó la oportunidad de compartir experiencias reales entre los agentes presentes, fomentando los intercambios sobre innovaciones técnicas y económicas y cuestiones de gobernanza. El Living Lab de Nueva Aquitania demostró su prometedora dinámica, con una fuerte cooperación entre los agentes e iniciativas concretas para gestionar las interfaces urbanas y restaurar los bosques. Los participantes elogiaron la implicación activa de los agentes locales, como los bomberos y la DFCI, y las iniciativas financieras propuestas por Blueforest y Plantons pour l’Avenir.
Las próximas etapas del proyecto FIRE-RES tendrán como objetivo reforzar la colaboración entre los agentes locales y europeos, en particular mediante la introducción de nuevas herramientas financieras y la continuación de la experimentación en las zonas piloto.
A la vista de los éxitos obtenidos, el coordinador del proyecto va a registrar el nombre FIRE-RES para mantener su red de Living Labs después de 2025, e invita a todos los socios a buscar vías para seguir financiando las acciones iniciadas por los Living Labs, ya que es necesario abordar a largo plazo determinadas cuestiones relacionadas con la ordenación del territorio.
Daphné Villain, Lucas Morrews
Créditos de las fotografías: Clement Sintes