Ha transcurrido otro año marcado por catástrofes inusuales relacionadas con el clima. De norte a sur, Europa luchó contra fenómenos meteorológicos extremos. Inundaciones en Eslovenia, Italia, Chequia y Alemania que obligaron a los habitantes a evacuar sus casas el día de Navidad; corrimientos de tierras en Noruega; incendios forestales descontrolados difíciles de contener por la lucha tradicional contra el fuego en Grecia; olas de calor en España, la última a principios de diciembre, cuando una masa de aire caliente disparó la temperatura hasta cerca de 27ºC en algunas ciudades.

El cambio climático, combinado con condiciones extremas, está provocando fenómenos catastróficos transfronterizos más frecuentes e intensos, algunos de los cuales suponen amenazas directas para la salud y la seguridad humanas. Se han creado varias estrategias, reglamentos y directivas de la UE para mitigar estos impactos y garantizar que las diversas funciones medioambientales, sociales y económicas de los bosques puedan cumplirse en el futuro. Además, los acontecimientos geopolíticos derivados de la guerra de Ucrania y la consiguiente prohibición de los productos petrolíferos refinados rusos también intensificaron la presión sobre los bosques europeos.

Es probable que el nuevo año nos traiga retos similares que los bosques plantados pueden ayudar a afrontar, ya que pueden estabilizar el clima regulando los ecosistemas, protegiendo la biodiversidad y desempeñando un papel integral en el ciclo del carbono al absorber CO2 y contribuir a una economía neutra en carbono, al tiempo que reducen la presión sobre  los bosques autóctonos/antiguos.

En el IEFC creemos que sólo la gestión forestal sostenible y el uso sostenible de los recursos pueden ayudar a combatir el cambio climático y contribuir a la prosperidad y el bienestar de las generaciones actuales y futuras. Esto solo puede lograrse capacitando a los gestores/propietarios forestales dándoles acceso a los últimos resultados de la investigación científica, a herramientas de apoyo a la gestión y proporcionándoles ejemplos de soluciones aplicadas por otros que puedan aplicarse o adaptarse para resolver sus problemas.

Durante 2023, el equipo del IEFC ha trabajado en la transferencia de los conocimientos adquiridos en el marco de varios proyectos de investigación. Con el fin de proporcionar la información técnica y los conocimientos necesarios a los propietarios y profesionales forestales, se organizaron varios seminarios web y conferencias en consonancia con las principales áreas de interés definidas en el plan estratégico del IEFC. En ellas se trataron temas como las herramientas desarrolladas para ayudar a la gestión forestal, como la aplicación telefónica SILVALERT para recopilar información sobre daños bióticos observados en los bosques o las herramientas informáticas desarrolladas en el marco del proyecto Virtual Forests; las perturbaciones, contando con la organización de la Conferencia Wind and Trees y la presentación de los principales logros del proyecto HOMED, que recopiló conocimientos científicos y soluciones prácticas para la gestión de plagas y patógenos emergentes en los bosques europeos; la conferencia final de COMFOR-SUDOE que trató de promover las plantaciones multiespecíficas como estrategia de adaptación resiliente al cambio climático y al declive de la biodiversidad o la organización del 5º Congreso Internacional sobre Bosques Plantados 2023 : los bosques plantados, una solución esencial basada en la naturaleza para satisfacer las crecientes necesidades de productos madereros, restaurar los ecosistemas forestales y mitigar el cambio climático.

Me gustaría expresar mi más profundo agradecimiento al equipo de la IEFC por su dedicación y duro trabajo, al Consejo por sus valiosas aportaciones que nos guían a lo largo del camino, a los Donantes por sus contribuciones y a todos nuestros miembros por su colaboración e interés. En el último año, el IEFC ha ampliado su red por toda Europa y más allá. Hemos incorporado oficialmente a Italia, Letonia y Nueva Zelanda, y esperamos que se unan más.

El creciente interés por nuestra red demuestra nuestros esfuerzos por marcar la diferencia a la hora de valorar la importancia de los bosques plantados para mitigar los efectos negativos del cambio climático y las perturbaciones en todo el mundo. El futuro es muy prometedor y confío en que, con el apoyo de esta creciente red multidisciplinar, el IEFC pueda seguir promoviendo la importancia de los bosques plantados y su contribución a la mitigación y adaptación al cambio climático: apoyando los esfuerzos emergentes hacia la reforestación y forestación de áreas destruidas o dañadas por riesgos (a)bióticos; fomentando una gestión forestal responsable con especial atención a la mejora de la productividad forestal; y ayudando en el proceso de desbloquear y valorar los beneficios forestales esenciales para un suministro sostenible y equitativo de bienes y servicios forestales. Que 2024 traiga paz, alegría y bosques resilientes, plantados o no.

Susana Barreiro, Presidenta del IEFC